“Asistencia y Prevención de violencia, abusos y Adicciones”
Job: “El que se vuelve a Dios”

¿Por qué Casa de Job?
El nombre «Casa de Job» se fundamenta en la historia bíblica de Job, un hombre justo y próspero que sufrió una serie de pruebas y desgracias. A pesar de estas dificultades, Job mantuvo su fe en Dios y su integridad moral, convirtiéndose en un ejemplo de resiliencia y esperanza.
El nombre «Casa de Job» evoca los siguientes significados:
Refugio y protección: La casa de Job representa un lugar seguro y acogedor donde las familias pueden encontrar refugio y protección ante las adversidades.
Fortaleza y resiliencia: La historia de Job nos enseña que es posible superar las dificultades y mantener la esperanza, incluso en los momentos más difíciles.
Integridad moral y valores: Job era un hombre íntegro y de valores sólidos, lo que lo convierte en un modelo a seguir para las familias que buscan construir una vida firme sobre la Roca.
Fe y esperanza: A pesar de las pruebas que enfrentó, Job nunca perdió la fe en Dios ni la esperanza en un futuro mejor.
La Organización «Casa de Job»:
- Brinda apoyo y contención a las familias que están atravesando momentos difíciles.
- Promueve la fortaleza, la resiliencia y la esperanza en un futuro mejor.
- Fomenta los valores de integridad moral, responsabilidad y respeto.
- Inspira a las familias a enfrentar las dificultades con fe y confianza.
Casa de Job es necesaria:
Porque en la historia de la humanidad todas las personas, en todo tiempo, debieron afrontar hechos adversos para defender su vida.
Porque continúan afirmando su presencia como personas.
Porque no estamos solos, estamos para sostenernos entre nosotros y todos juntos de Dios.
Casa de Job nació, tal vez, cuando sentimos que la posmodernidad se imponía y a nuestros adolescentes no les llegaba el tiempo de crecer con una vida sana teniendo la posibilidad de ser seres humanos lúcidos, eligiendo con claridad, para ser hombres y mujeres felices.
Porque creemos que Dios tiene directa intervención en todas las situaciones que nos toca vivir, ya que es Soberano.
Job sufrió, como muchos sufren hoy en día. Y pudo encontrar un refugio. Perdiendo todo, encontró lo más importante, su fe y su restauración.
Y aquí está el pequeño gran desafío de dar a luz un espacio para pensar, contar, escuchar, dialogar. Una nueva casa donde nuestros niños/as, adolescentes, jóvenes y adultos puedan aferrarse a Dios y encontrar esperanza.